El director de Yacyretá, Enrique Cáceres Rojas, explicó que la maquinización del brazo de Aña Cua no es posible antes de que se logre una solución definitiva de la deuda de la binacional. Cuestionó, por otro lado, las fórmulas que aplicaron anteriormente para la realización del proyecto de generación auxiliar de Yacyretá, como la figura del iniciador privado.

“Mientras no arreglemos la deuda de Yacyretá no podemos asumir otro compromiso ni pensar en obra o emprendimiento adicional, así de terminante es la cláusula especial suscripta en el Acuerdo del 25 de febrero de 2011 y yo la voy hacer cumplir a rajatabla. Soy optimista en pensar que prontamente tendremos las propuestas finales de solución para la deuda, puesta a consideración de las altas partes o sea los Gobiernos a través de los ministerios respectivos”, expresó el representante paraguayo.
“Ya no es posible postergar el arreglo de la deuda. Es urgente. Es una prioridad encontrar soluciones justas que reivindiquen no solo la posición de Paraguay, sino de la misma Yacyretá como una empresa viable y rentable. Estamos en ese camino, pues existe un compromiso firmado, en el que se ponen plazos para encontrar una solución al tema”, agregó.

Explicó que es responsabilidad de los dos directores de Yacyretá presentar las propuestas que den solución. “Yo tengo elaboradas algunas de ellas, pero como aún no lo he presentado a mi colega argentino, el Arq. Óscar Thomas, mal estaría que se entere por otros medios de dichas propuestas. Pero sí puedo prometer que una vez presentadas daremos a conocerlas y el curso de las negociaciones”, apuntó.

Añadió que la energía es uno de los temas estratégicos no solo para la Argentina, sino que en muy breve plazo lo será también para el Paraguay. “Existen estudios serios que dicen que si la región se declara en ‘statu quo’, ergo no innova en materia energética el país y la región, se queda sin energía para el 2020”, advirtió.

Al referirse al proyecto de maquinización del brazo Aña Cua, el director paraguayo dijo que forma parte de varias realidades. “Este vertedero desaprovecha generación de energía. Existen los recursos para poder hacer la obra y además ella es viable y rentable, pero con deuda cero”, condicionó.

Agregó que, en su momento, deberá ejecutarse la obra pero “sin la sombra negra de la iniciativa privada”. Bajo esta figura, antes pretendieron dar marcha al emprendimiento, favoreciendo a la empresa argentina Pescarmona. “No es posible privilegiar a nadie”, concluyó Cáceres Rojas.

Nota publicada en el diario Abc Color