La defensa irrestricta de los intereses nacionales, que asumieron autoridades paraguayas de la Entidad Binacional Yacyretá, fue destacada por la prensa y diversos sectores de la sociedad.
El diario Última Hora, en su edición impresa de hoy 28 de agosto, en el titular principal señala “Paraguay impone su derecho al 50% de energía de Yacyretá”. Agrega que “El acuerdo no implica ninguna concesión a favor de Argentina, que tampoco puso condicionamientos, según el jefe técnico paraguayo de Yacyretá”.
El mismo medio escrito, en su Editorial, bajo el título “defender también los derechos sobre uso de energía de Yacyretá”, hace referencia a la actitud asumida por trabajadores, cuando un grupo de sus pares de la margen izquierda impidieron el lunes las tareas de conexión de la línea 500 kV. Resalta la actitud asumida por el director Nicanor Duarte Frutos “quien se plantó ante las pretensiones argentinas”.
A continuación, compartimos el texto de referencia:
“Sin que hayamos superado aún la crisis por el acta secreta firmada con el Brasil sobre la energía de Itaipú, se abrió un nuevo conflicto, esta vez con la Argentina, cuando funcionarios y obreros del vecino país se opusieron el lunes a que sus pares paraguayos avancen con las obras de adecuación de la línea de 500 kV para que el Paraguay pueda utilizar el cincuenta por ciento de la producción que le corresponde en la represa hidroeléctrica de Yacyretá. Aunque se dio un principio de acuerdo para superar la situación, fue un nuevo atentado contra la soberanía energética de nuestro país, que debe seguir siendo defendida con firmeza por nuestras autoridades. Ya no hay que permitir el avasallamiento a nuestros derechos.
Aún no se había resuelto con claridad y firmeza el lamentable episodio ocurrido a nivel diplomático con el Brasil, con la famosa acta secreta que se firmó sobre la compraventa de energía producida por la represa de Itaipú, en condiciones muy desfavorables para el Paraguay, cuando se ha desatado otro conflicto internacional, en torno a la comercialización de la energía eléctrica, esta vez con la Argentina, afectando a la represa hidroeléctrica de Yacyretá.
El incidente ocurrió en la mañana del lunes en la zona de la represa, ubicada entre las localidades de Ayolas (Paraguay) e Ituzaingó (Argentina), cuando un contingente de funcionarios y obreros del vecino país, principalmente empleados de la Compañía Administradora de Mercado Mayorista Eléctrico SA (Cammesa), con la venia de las autoridades argentinas de la Entidad Binacional Yacyretá, impidieron por la fuerza que trabajadores paraguayos, a cargo del ingeniero Leopoldo Melo, jefe del Departamento Técnico de la margen derecha de Yacyretá, puedan avanzar con las obras de adecuación definitiva de la línea de 500 kilovoltios (kV) de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), necesarias para que nuestro país pueda retirar el cincuenta por ciento que le corresponde de toda la energía eléctrica producida en la usina.
Según los informes, la empresa Cammesa ponía como condición que Yacyretá primero repare la línea de transmisión argentina (LA3), que quedó fuera de servicio tras el gran apagón que afectó a la Argentina, el pasado 16 de junio. Si el Paraguay retira toda la energía que le corresponde, el país vecino quedaría en “situación técnica vulnerable”, de acuerdo con el argumento que dieron a conocer. Lo que no han querido reconocer es que la ejecución de las obras es un derecho pleno del Paraguay, que forma parte de un cronograma que debe concluir en diciembre de este año, permitiendo la conexión de la línea de transmisión Yacyretá-Ayolas-Villa Hayes, permitiendo que el país pueda disponer finalmente del cincuenta por ciento de la energía (1.150 MW) que le corresponde según el tratado.
Impedir por la fuerza los trabajos, incluso en territorio paraguayo, fue una violación de la soberanía y así lo entendieron los trabajadores de nuestro país, que ayer se manifestaron en protesta en el lugar, haciendo flamear la bandera tricolor y entonando la canción . El director paraguayo de Yacyretá, el ex presidente Nicanor Duarte Frutos, acudió al lugar, defendió el reclamo de los trabajadores y se plantó ante la pretensión argentina. Finalmente, tras la intervención del director y de los técnicos paraguayos, se logró un acuerdo con el director argentino, Martín Goerling, garantizando que los trabajos puedan continuar como estaban previstos, además de llevar adelante acciones técnicas que puedan evitar que la acción perjudique al vecino país.
Esta misma firmeza es la que no se vio cuando los presidentes Horacio Cartes y Mauricio Macri negociaron las notas reversales sobre Yacyretá, ni cuando los representantes de Mario Abdo Benítez y Jair Bolsonaro firmaron el acta secreta sobre Itaipú, ambas desfavorables para el Paraguay. Esta misma firmeza es la que esperamos se mantenga de cara a la crucial renegociación del Anexo C del Tratado de Itaipú para el 2023.”