El director paraguayo de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) Miguel Fulgencio Rodríguez concurrió nuevamente, este martes, a la Cámara de Diputados. Esta vez, en una reunión con los miembros de la comisión directiva de la Cámara Baja el alto funcionario informó sobre la maquinización del brazo Aña Cuá del río Paraná.

El titular de Yacyretá explicó, en la ocasión, que el llamado a preselección de oferentes para la ampliación del parque de generación de la Central Hidroeléctrica en el segundo brazo es un trámite administrativo que iniciaron los gobiernos de Paraguay y Argentina y que no se contrapone con las negociaciones en torno a la deuda de la EBY con el Tesoro argentino.

“Con la preselección de oferentes le estamos diciendo a las empresas paraguayas y argentinas que queremos construir Aña Cuá y que necesitamos que se agrupen”, indicó y añadió que la prioridad del Gobierno del presidente Fernando Lugo es solucionar la deuda.

Al respecto señaló que ambos gobiernos han integrado en Yacyretá un grupo de trabajo binacional a fin de dar cumplimiento a la declaración de los directores, de febrero pasado.

“Hoy sabemos exactamente cuánto es la deuda; 5.700 millones de dólares y los demás son intereses, es decir, estamos redondeando 14 mil millones de dólares que debe pasar por un proceso de certificación y a partir de ahí, de acuerdo a las instrucciones de las altas partes, decidiremos el camino a seguir”, indicó. No obstante, fue tajante al adelantar que el Gobierno no reconoce los intereses como parte de la acreencia.

Al fundamentar por qué la maquinización del brazo Aña Cuá no necesita la aprobación del Congreso, otro de los temas principales de análisis, el Ing. Rodríguez indicó que el Tratado establece que Yacyretá puede intervenir en todas sus obras e instalaciones a los efectos de mejorar su capacidad de generación de energía.

“Aña Cuá forma parte del complejo de Yacyretá, así como está compuesto por la exclusa de navegación, el vertedero principal, la casa de máquinas, y 49 km de presas laterales desde Ayolas hasta San Cosme y Damián”, agregó.

El director resaltó los beneficios que significará para el país la construcción de la obra. Dijo que sin embargo, la no maquinización del vertedero está significando una pérdida de 70 millones de dólares al año.

El diputado Luis Gneiting manifestó que lo importante es que Paraguay pueda seguir con las negociaciones con la Argentina con respecto a la deuda y valoró el esfuerzo de la actual administración de la EBY para avanzar en la terminación de las obras y el recrecimiento del embalse a la de 83 metros sobre el nivel del mar, que acabó con la incertidumbre que había sobre la afectación de las aguas.

Justo Cárdenas señaló que la postura de los diputados no es la del enfrentamiento y que al contrario buscan constituirse en aliados estratégicos para la concreción de la obra que significará un gran avance para el país.

10% más de energía

El proyecto de ampliación del Complejo Hidroeléctrico de Yacyretá se materializará con una obra civil que se extenderá desde los vanos 1 a 6 del actual vertedero y las turbinas se instalarán entre los vanos 2 a 6 con una potencia de 54,6 MW por unidad, que totalizarán una potencia de 273 MW, equivalentes a un 10% de la actual capacidad de generación de la central energética binacional.

Cada unidad de generación incluye turbinas Bulbo muy similares a las actuales turbinas tipo Kaplan de la Central Principal, sólo que su diseño es horizontal y no vertical como las existentes.

La mano de obra directa que se prevé ocupar está en torno a los 2.400 obreros de la zona de influencia, y su impacto multiplicador en la economía estaría en torno a los 6.000 en forma indirecta.